Cuando un bebé nace, lo primero que quiere hacer todo el mundo es acudir al hospital para ver al bebé y así darle la bienvenida. Pero en la medida de lo posible habría que hacer esa visita con cuidado para evitar poner en riesgo la salud del bebé.
Aunque no hay una regla fija acerca de cuándo deberías recibir a los invitados después de que nazca el bebé, aquí te proporciono algunas pautas a tener en cuenta. Recuerda, lo más importante es la salud del bebé para que se pueda desarrollar correctamente.
¿Es recomendable que la gente acuda al hospital a visitar al bebé?
Las nuevas mamás tienen diferentes opiniones sobre si deberían invitar a sus seres queridos a visitarlas en el hospital después de dar a luz. Algunas prefieren descansar, recuperarse y esperar hasta regresar a casa para recibir visitas, mientras que otras disfrutan de la compañía de familiares y amigos cercanos en el hospital poco después del nacimiento del bebé.
Es importante recordar que dar a luz es un proceso agotador y mereces tiempo para descansar y adaptarte a la maternidad. Durante tu estancia en el hospital, ocurren muchas cosas, como las tomas, los cambios de pañales y los controles médicos tanto para ti como para el bebé. Por lo tanto, si no te sientes cómoda recibiendo visitas, está bien decir que prefieres no hacerlo.
Sin importar cómo te sientas al respecto, es importante seguir el protocolo del hospital. Asegúrate de entender cuántos visitantes o acompañantes pueden estar contigo durante tu estadía, cuáles son los horarios de visita y si hay requisitos de seguridad, como controles de temperatura, que debes cumplir.
¿Los bebés son susceptibles a los virus?
Los bebés recién nacidos no tienen aún la oportunidad de fortalecer su sistema inmunológico, lo que los hace más vulnerables a las infecciones causadas tanto por bacterias como por virus.
Además, su fragilidad los expone a riesgos más graves, como la sepsis y la meningitis. En esta etapa, carecen de la protección que brindan las vacunas y su barrera hematoencefálica, que impide la entrada de infecciones al cerebro, aún no está completamente desarrollada.
Por esta razón, consideramos que cualquier bebé menor de tres meses con fiebre es motivo de preocupación y requiere atención médica urgente. Y en la medida de lo posible hay que limitar las visitas para evitar que el riesgo de enfermar aumente.
¿Cómo evitar que el bebé enferme por las visitas?
Es natural que te preocupes mucho por la salud de tu bebé, y con razón. En esta etapa, su sistema inmunológico aún está en desarrollo y no puede protegerlo eficazmente contra los gérmenes. De hecho, se estima que el sistema inmunológico de un recién nacido no funciona plenamente hasta que alcanzan los 2 meses de edad.
Es importante que te sientas segura al establecer las reglas para las visitas a tu bebé. Si alguien no puede cumplir con estas reglas, es tu prerrogativa decidir si deben o no conocer a tu pequeño. También puedes considerar pedir a tus invitados que tomen ciertas precauciones antes de acercarse a tu bebé.
¿Cuáles son las buenas prácticas de higiene cuando se presenta al bebé una nueva persona?
Cuando te acerques a un recién nacido, es fundamental cuidar algunos detalles para mantener al bebé seguro y saludable. En primer lugar, antes de tocarlo, asegúrate de lavar tus manos minuciosamente. También es aconsejable evitar usar joyas en tus manos, ya que pueden albergar gérmenes. A pesar de lo irresistibles que pueden ser las mejillas de un bebé, es importante recordar que su boca contiene una cantidad significativa de bacterias.
Es preferible que los visitantes eviten besar al bebé o acercarse demasiado a su rostro. Además, considera la posibilidad de proporcionar mascarillas a los visitantes para reducir la posibilidad de propagar gérmenes.
Es esencial que todos los que deseen conocer al bebé estén completamente sanos, sin ningún signo de enfermedad como fiebre, congestión nasal, tos, diarrea u otros síntomas, ya que estos pueden poner en riesgo la salud del recién nacido.
Mantener estas precauciones sencillas, como el lavado de manos y evitar el contacto cercano en caso de enfermedad, ayudará a proteger la salud del bebé y garantizará que sus primeros días sean seguros y felices.
¿Es bueno sacar al bebé a la calle en sus primeros días de vida?
Desde el principio, es importante limitar la exposición de tu recién nacido a lugares con mucha gente. Esto contribuye a prevenir la propagación de gérmenes en un bebé que es especialmente vulnerable.
Desde Tiernos Momentos te sugerimos evitar lugares con aglomeraciones como centros comerciales, aviones o parques temáticos hasta que tu bebé haya tenido la oportunidad de fortalecer su sistema inmunológico con el tiempo. Si te sientes un poco confinado en casa con tu recién nacido, puedes considerar llevarlo a dar un paseo al aire libre, pero asegúrate de protegerlo adecuadamente contra las condiciones climáticas.